Entonces, la situación es la siguiente...
Periquita de los palotes, aka iCy creía que estaba totalmente entregada a un sentimiento enfermizo desde hace 6 meses.
Del cual los tenía plenamente enterados y medio hartos con el gajo de posts emos que venia escribiendo.
Que de realidad tienen mucho pero de esencia eran algo confusos.
Creyendo que con mis palabras bonitas quizás el regresaría y diría - Oh! la perdí... debo recuperarla - y sintiera ese deseo de olvidar sus estúpidos prejuicios, sus problemas de personalidad y venir aquí, pedirme perdón y continuar con nuestros estúpidos sueños en una estúpida irrealidad que no me sirve ni para un carajo.
Rechazando todo tipo de propuestas, no queriendo salir con nadie y recluirme en mi propio dolor obtuso que no me dejaba ver más alla de lo que ya podía ver.
La cuestión es que yo, estaba ciega.
Me negaba a ver lo que tenía - N A D A - y quería seguir entregando lo que ya se me había arrebatado, escribiendo posts egoístas de pseudo-superación autoengañandome a mí misma creyendo en esa estúpida actitud de "repitelo hasta que te lo creas".
Todo esto me pudo haber ocasionado que mucha gente me deje de leer por "haber perdido mi exceso de felicidad" y dedicarme integramente a la literatura semi-despechada con indicios de obsesión.
Que de hecho, ocurrió.
Pero... ese solo era el comienzo.
Lo que para mi era bueno, para mi salud mental era un triste deterioro y para serles sincera no la consideraba mucho a la hora de conseguir lo que realmente quería, que claro está... no sucedió, ni sucederá. Más bien decidía ignorar a aquella vocesita que me decía "Solo te está usando" o "No volverá ni en un millón de años..." y es que, ¿Como hacerle caso? si la muy desgraciada era tan insignificante a la hora de poder expresar otro tipo de situaciones que me causaban más placer que el mero masoquismo... llevandome al orgasmo. - literalmente hablando - y haciendo que experimente una bola de sensaciones que mejor ni les cuento porque para eso está otro blog.
Y en esas me encontraba yo, sumergida en mi burbuja de cristal, hasta que llegó una señal divina del cielo - no, en realidad fue del messenger - en el cual apareció una personita que literalmente es un angel caído del cielo.
Y no, no es que esté enamorada ni mucho menos, les explicaré mejor el punto.
Durante meses estuve negandome a la posibilidad de cerrar un capitulo doloroso en mi vida por la cobardía de creer que una vez yo lo cierre, no habrá marcha atrás, entonces si el vuelve arrepentido yo no podré decirle que sí.
- aunque en el fondo tenga muchas ganas de hacerlo -
Despues de ya 6 meses pensando en eso, comprenderán que debía de asomar algo de cordura a mi orate cerebro y la vocesita se volvió más intensa.
Con la llegada de aquel angel, que sin duda significa más de lo que el piensa ya que no es por él mismo sino por lo que representa, logré sacarme de la mente la obsesión.
y pensar en otras cosas mucho más interesantes, como el hecho de mi propia vida.
Que sin duda es mucho más divertida que andar oliendole las bolsas a cualquier tipo con el fin de esperar alguna señal de interés por su parte.
Y no, no es que piense en el angel de una forma romantica, el gusto está y punto...
Pero más allá de todo eso, le debo - literalmente - el hecho de haberme sacado de forma rapida e indolora la ponzoña de vampiro de aquel viejo "chupa-almas".
That's All.
Periquita de los palotes, aka iCy creía que estaba totalmente entregada a un sentimiento enfermizo desde hace 6 meses.
Del cual los tenía plenamente enterados y medio hartos con el gajo de posts emos que venia escribiendo.
Que de realidad tienen mucho pero de esencia eran algo confusos.
Creyendo que con mis palabras bonitas quizás el regresaría y diría - Oh! la perdí... debo recuperarla - y sintiera ese deseo de olvidar sus estúpidos prejuicios, sus problemas de personalidad y venir aquí, pedirme perdón y continuar con nuestros estúpidos sueños en una estúpida irrealidad que no me sirve ni para un carajo.
Rechazando todo tipo de propuestas, no queriendo salir con nadie y recluirme en mi propio dolor obtuso que no me dejaba ver más alla de lo que ya podía ver.
La cuestión es que yo, estaba ciega.
Me negaba a ver lo que tenía - N A D A - y quería seguir entregando lo que ya se me había arrebatado, escribiendo posts egoístas de pseudo-superación autoengañandome a mí misma creyendo en esa estúpida actitud de "repitelo hasta que te lo creas".
Todo esto me pudo haber ocasionado que mucha gente me deje de leer por "haber perdido mi exceso de felicidad" y dedicarme integramente a la literatura semi-despechada con indicios de obsesión.
Que de hecho, ocurrió.
Pero... ese solo era el comienzo.
Lo que para mi era bueno, para mi salud mental era un triste deterioro y para serles sincera no la consideraba mucho a la hora de conseguir lo que realmente quería, que claro está... no sucedió, ni sucederá. Más bien decidía ignorar a aquella vocesita que me decía "Solo te está usando" o "No volverá ni en un millón de años..." y es que, ¿Como hacerle caso? si la muy desgraciada era tan insignificante a la hora de poder expresar otro tipo de situaciones que me causaban más placer que el mero masoquismo... llevandome al orgasmo. - literalmente hablando - y haciendo que experimente una bola de sensaciones que mejor ni les cuento porque para eso está otro blog.
Y en esas me encontraba yo, sumergida en mi burbuja de cristal, hasta que llegó una señal divina del cielo - no, en realidad fue del messenger - en el cual apareció una personita que literalmente es un angel caído del cielo.
Y no, no es que esté enamorada ni mucho menos, les explicaré mejor el punto.
Durante meses estuve negandome a la posibilidad de cerrar un capitulo doloroso en mi vida por la cobardía de creer que una vez yo lo cierre, no habrá marcha atrás, entonces si el vuelve arrepentido yo no podré decirle que sí.
- aunque en el fondo tenga muchas ganas de hacerlo -
Despues de ya 6 meses pensando en eso, comprenderán que debía de asomar algo de cordura a mi orate cerebro y la vocesita se volvió más intensa.
Con la llegada de aquel angel, que sin duda significa más de lo que el piensa ya que no es por él mismo sino por lo que representa, logré sacarme de la mente la obsesión.
y pensar en otras cosas mucho más interesantes, como el hecho de mi propia vida.
Que sin duda es mucho más divertida que andar oliendole las bolsas a cualquier tipo con el fin de esperar alguna señal de interés por su parte.
Y no, no es que piense en el angel de una forma romantica, el gusto está y punto...
Pero más allá de todo eso, le debo - literalmente - el hecho de haberme sacado de forma rapida e indolora la ponzoña de vampiro de aquel viejo "chupa-almas".
That's All.
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